11. Lo que hemos aprendido

 

 


A lo largo de nuestra experiencia en este tipo de actividades colaborativas, hemos aprendido varias cosas:

  • La necesidad de explicar las ventajas de compartir conocimiento en plataformas abiertas con licencias libres. Más allá de las usuales plataformas de publicación de contenido digital, como las redes sociales, es necesario conocer y familiarizarse con otras plataformas que permiten compartir conocimiento sin fines de lucro, sin publicidad y que no recogen datos de los usuarios (no nos vigilan). Como veremos más tarde en el curso, plataformas como Internet Archive y Wikimedia Commons, nos permiten poner a disposición los materiales, con licencias libres e incluso evitando la censura. 

  • Los mejores resultados se consiguen cuando logramos reunir a personas con distintos saberes: profesionales de la información y la comunicación, especialistas en los temas de derechos y militantes sociales para crear prácticas y narrativas comunes.

  • La colaboración necesita organización. Se construye a partir de aprendizajes y de lazos afectivos que se sostienen en el tiempo, a través de encuentros, reuniones y espacios comunes.

  • Los cuidados colectivos son fundamentales, porque aún en lo digital, los cuerpos importan. Entre otras cosas, tenemos que generar colectivamente nuestras prácticas de seguridad en la calles y de seguridad digital, así como acuerdos colectivos para abordar la violencia dentro de los movimientos.